Vacíos
La espera
Ansiedad por algo perdido. Por lo que se fue de nuestras manos, volando hacia sitios de nada, a un lugar sin nombre, donde el silencio acompaña a los recuerdos. Esos recuerdos tan profundos, que se deslizan por mi cabeza, gota a gota, retorciéndome en mi “dentro”, rompiéndome el corazón. La tristeza me invade de nuevo y vuelvo a recorrer ese círculo tan pequeño, que exprime mi alma. Busco hasta el último recuerdo que me queda de “ti”. Llorando por “lo que fue”, pensando “lo que hubiera sido” y con la angustia de “lo que es”.
Empiezo a sudar, a gritar callado, los nervios se apoderan sobre mí y termino cayendo en un pozo sin fondo, sin luz, lleno de oscuridad.
Y todas las noches te espero, ansioso de verte en mis sueños, donde sólo te puedo ver...
Luis Loras, 1999
Luis Loras